Empecé este libro con muchas ilusión y muchas ganas por las pedazos de críticas que tenía. Tuvo un boom enorme (sobre todo con la película) y todo el mundo hablaba maravillas de él.
A pesar de ello, no tenía demasiado hype, porque sabía de lo que iba, y sinceramente no soy muy fan de los videojuegos.
Tengo que decir que la trama me ha encantado. Me parece muy original e interesante la competición que se crea tras la muerte de Halliday en búsqueda del huevo de pascua y las consecuencias que se crea por ello, pero, mi problema con este libro, ha sido el autor.
La trama, repito, es muy interesante y original, pero desde mi punto de vista, el autor no ha sabido sacarle provecho ni desarrollarla de un modo adecuado. La historia está llena de clichés, los giros que tiene los ves venir y en ningún momento veo que aporte nada.
Es cierto, y esto tengo que dárselo al autor, es que ha sabido combinar muy bien la cultura clásica de los 90 con el futuro. Me ha encantado leer nombres de consolas, videojuegos, música, películas y series conocidas y las referencias que el autor les hacía. A pesar de ello, hay otro pero.
Una cosa que el autor ha hecho continuamente a lo largo de la historia, ha sido que al incorporar estos títulos, los explicaba todo, cosa que me parece muy acertada porque muchos de ellos no los conocía, y así no me perdía, pero en muchas ocasiones, explicaba cómo funcionaba un juego, llevándose varios párrafos, pero no explicaba cómo Wade se enfrentaba a él ni cómo se lo iba pasando. Es más, las primeras 100 páginas se me hicieron muy pesadas, ya que el autor te explica de lleno todo el mundo de OASIS, el cual es muy complejo y está lleno de detalles.
Esto me chocó muchísimo, porque a veces me olvidaba de estar leyendo un libro de literatura, y en su lugar parecía que leía un manual de videojuegos de la cultura de los 90. Como ya he dicho antes, me parece acertado explicar cómo funciona, pero yo quería leer la historia de Wade y sus compañeros, no tenía demasiada intención de aprender a jugar a todos esos juegos.
Otro fallo que veo en el libro son los personajes. Me parecieron muy planos, iguales entre ellos... no empaticé con ninguno y tampoco me preocupé en ningún momento por ninguno. Sobre todo, el que menos me gustó fue Wade. Odiaba su actitud, en OASIS iba de amo, bueno en todo y muy sobresaliente, y luego en la vida real era un chico agorafóbico y antisocial que solo se pasaba el día en su apartamento jugando sin querer saber nada del mundo exterior. Por el final además empiezan a pasarle demasiadas cosas buenas, de pronto se convierte en el amo ya no solo en OASIS sino también en el mundo real... uff... no me pareció para nada un personaje ni coherente ni real.
Mi última queja va para la historia del mundo real. Prácticamente, todo el libro de desarrolla en el mundo virtual, lo cual es normal, pero me hubiera gustado, que el autor se hubiera centrado un poco más en los EEUU de Wade, ya que es una distopía y aunque al final cierren lo esencial, hay varias cuestiones que dejan en el aire.
Dicho esto, no tengo nada más que decir. Es una lectura que se me hizo pesada en muchos momentos (sobre todo el inicio) y de la que esperaba mucho más. Si estáis interesados en saber sobre la cultura popular de los 90, este es vuestro libro, si buscáis una trama buena e intensa y que os marque... a mi este libro al menos, no me lo consiguió.
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